El drama de los judíos deportados como cautivoa a Babilonia por el rey Nabucodonosor II tras la conquista de Jerusalén en 587 a. C. se entronca con la historia italiana de finales del siglo XIX. El coro de los esclavos judíos que canta a la libertad y a la fraternidad expresa el ansia de libertad de los italianos frente a la dominación austríaca, convirtiéndose en un exaltado canto patriótico.
Seguro que el fragmento del coro del Acto III que se propone a continuación te resultará conocido.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario